Entre 2011 y 2013, el barrio de Son Gotleu, en Palma, fue el escenario de una iniciativa vanguardista en el ámbito del desarrollo comunitario: el proyecto Comenius Regio. Este esfuerzo colectivo tenía como objetivo fundamental fomentar que la interacción entre los niños y jóvenes del barrio con los adultos que trabajaban en el barrio fuese más restaurativa, siguiendo el ejemplo inspirador de la ciudad de Hull, en Inglaterra, que aspiraba a convertirse en una ciudad restaurativa.
- Participantes Varios: La singularidad de este proyecto residía en su capacidad para unir diferentes sectores de la comunidad: personal docente de los centros educativos del barrio, trabajadores de los servicios sociales, miembros de la policía local y voluntarios de una ONG. Esta colaboración multidisciplinar fue clave para el desarrollo y éxito de la Zona Restaurativa.
- Intercambio de Experiencias y Formación: El proyecto fue notablemente enriquecido por las visitas formativas entre Palma y Hull, permitiendo un valioso intercambio cultural y educativo. Los participantes tuvieron la oportunidad de visitar a Hull en dos ocasiones, donde pudieron aprender directamente de las experiencias de esta ciudad en el ámbito de la implementación de las pràcticas restaurativas.
- Implicación de la policía local: La formación en reuniones restaurativas corrió a cargo de Jean Schmitz, un experto reconocido en el campo, proporcionando herramientas y técnicas esenciales para la mediación y la resolución de conflictos. La formación en facilitación de reuniones fue especialmente importante para la policía local.
- El Vídeo Como Testimonio: El vídeo creado como parte de este proyecto sirve como poderoso testimonio del esfuerzo colectivo y del cambio positivo generado en Son Gotleu. Muestra el contexto en el que se desarrolló el proyecto, junto con testimonios emocionantes de miembros de todos los grupos participantes. A través de sus palabras, se revela la transformación vivida tanto a nivel personal como comunitario.
- Un Legado Inspirador: A pesar del paso de los años, el vídeo no pierde su relevancia ni su impacto emotivo. Sirve como recordatorio de la potencia de una realidad alternativa basada en la colaboración, empatía y acción comunitaria. Este proyecto y su documental asociado muestran que es posible construir comunidades más cohesionadas y soportes a través de la educación y del enfoque restaurativo.
